Los trips son el peor enemigo de muchos cultivos y representan un problema que puede tener grandes repercusiones en poco tiempo. Manejar esta plaga es algo que no se puede tomar a la ligera: prevenir, en la medida de lo posible, solucionar la plaga en cuanto se presenta y tomar en cuenta todas las consideraciones de control son las acciones más adecuadas para evitar daños mayores. Si crees que puedes estar sufriendo una plaga de trips, no dudes en pedir ayuda a una empresa de control de plagas antes de que sea demasiado tarde.
Descripción y desarrollo
Los trips son insectos de tamaño pequeño y de forma alargada y aplanada. Los adultos tienen cuatro alas peludas. Su color puede variar cambiando del gris al amarillo o al marrón. Los trips son portadores de virus, principalmente de la famila Tospovirus, los cuales causan pérdidas significativas en las cosechas y son incurables. Los cultivos afectados son: tomate, berenjena, cebolla, ajo, poro, patata y otros cultivos como el cacahuete.
El primer estadio del desarrollo de los trips es el huevo y se verá favorecido por las altas temperaturas. Las hembras ponen los huevos en los tejidos de la planta y las larvas que salen de los huevos se alimentan de los tejidos circundantes.
Estos insectos posteriormente realizan la transición de pupa a adulto en el sustrato o en las hojas de la zona inferior de la planta. La larva vive en las hojas, pero, tan pronto como alcanza el estado idóneo para continuar su desarrollo, cae al suelo o sobre las hojas situadas en la parte inferior de la planta, después pasará a prepupa y pupa, donde permanecerá hasta la aparición de un adulto con alas totalmente desarrolladas con quien pueda reproducirse. La duración del ciclo biológico completo es de sólo unas pocas semanas.
Daños que causa
Los trips dañan el cultivo al extraer los fluidos de las células vegetales. Las células vacías se llenan de aire y se vuelven de un color gris plateado con puntos negros, debido a sus excrementos. Además, pueden causar muchos otros síntomas dependiendo del tipo de cultivo.
Por ejemplo, los trips causan deformación en los frutos en el caso de pepinos jóvenes; en el pimiento dulce, causan daños en la apariencia de los frutos; en plantas ornamentales dañan la flor deformándola. Solo unos pocos trips son suficientes para causar daños muy graves. Además son portadores de virus que dañan a las plantas y cultivos.
Plaga y enfermedades
Los trips adultos tienen una dieta variada basada principalmente en el polen, pero la larva se alimenta de los tejidos de la planta, siendo esta la responsable de la mayor parte del daño producido.
La larva succiona el líquido de las hojas, pero también de pétalos, brotes y frutos. Los primeros síntomas para darse cuenta que es una plaga, incluyen una fuerte decoloración de la hoja, quedando esta casi transparente, y la aparición de puntos negros. Su aparato bucal raspa los tejidos que posteriormente succionará. La capa superior del tejido no suele ser dañada, quedando un área de tejido sin afectar en el centro la zona decolorada.
Debido a ciertas sustancias tóxicas presentes en la saliva de los trips, comienzan a aparecer deformaciones en brotes y flores de las plantas afectadas. En los casos de una plaga severa, las hojas podrían secarse por completo.
Además, cuando los trips sienten un ataque segregan una sustancia que contiene acetato de decilo y acetato de dodecilo, feromonas que actúan como señal de peligro para otros trips que se encuentren en una zona cercana.
Soluciones para el control de plaga y prevención
Debido a que los trips transmiten virus, es importante revisar las cosechas para detectar su aparición lo antes posible. El método clásico es utilizar trampas adhesivas de color azul, ya que los trips se sienten muy atraídos por este color. Otra solución para evitar la plaga sería rociar la planta con un producto que las aleje, que no contenga químicos severos que dañen la cosecha.
Si se llega a detectar la presencia de trips es necesario aplicar tratamientos apropiados para disminuir el riesgo de infección, incluyendo el uso de insecticidas ecológicos como el jabón de potasa o los extractos de plantas con piretro, siempre que se trate de áreas donde se permita su aplicación.
Se recomienda que las plantas sean rociadas por completo, porque los trips se refugian bajo los nervios de las hojas, dificultando así el alcance del producto.
Otra de las acciones de desinsectación más comunes ante una plaga de trips es la utilización de hongos entomófagos para combatir esta plaga. En cualquier caso, si sufres una plaga de trips y para asegurarte de que no vas a perder por completo la cosecha, no dudes en solicitar los servicios de un profesional, que te asesore acerca de cómo combatir la plaga sin dañar las plantas.