En los últimos años los procedimientos utilizados para el control de plagas de insectos se han ampliado. Gracias a los avances tecnológicos y científicos, así como al estudio de las distintas variedades. Consiguiendo métodos de desinsectación más efectivos que se adaptan a cada situación, lugar o tipo de plaga. Descubre cuáles son los métodos de control más comunes que utilizan las empresas de limpiezas y los profesionales especializados.
Métodos químicos
El uso de productos químicos biocidas es la manera más tradicional que eliminar la presencia de todo tipo de bichos. Aunque debido a su toxicidad, la tendencia en las limpiezas especiales urgentes es utilizarlos cada vez menos. Ya que pueden tener consecuencias para el resto de seres vivos y el medio ambiente en general. Dentro de este grupo podemos encontrar insecticidas de contacto, como los geles o líquidos pulverizados. Estos son de los más utilizados en la fumigación de cucarachas, hormigas o moscas.
Uso de frío y calor
A la hora de encontrar alternativas a los productos desinsectantes químicos, el frío y el calor son especialmente eficaces. Su aplicación consiste en exponer las zonas a tratar a una energía calorífica determinada de manera homogénea. Para ello los servicios de desinsectación usan unidades térmicas y equipos ventiladores con termostatos muy sensibles. Asegurando por tanto la integridad de la propiedad en la que se aplica pero acabando con la presencia de insectos.
Aspiradores para eliminar la presencia de insectos
Estos dispositivos son utilizados sobretodo en casos de desinsectación de ácaros. Aunque los aspiradores también han demostrado ser útiles frente a otros insectos. Sin embargo, requiere una limpieza posterior y no garantiza la eliminación total o que vuelvan a aparecer. Por lo que suele usarse como complemento a otros métodos de control.
Lucha biológica
Sin duda alguna la manera más sostenible de eliminar las plagas de insectos. Ya que su uso implica agentes naturales presentes en otros medios. Dentro de esta técnica se engloban por lo tanto todos los procedimientos que intenten acabar con la plaga de manera más o menos natural. Esto se hace mediante la presencia de depredadores específicos, machos estériles que impiden la reproducción y extensión de la población o la introducción de virus o bacterias que acaban con los individuos de una plaga en particular.